
22 May La importancia de practicar la meditación en la creatividad
Este es un post invitado escrito por Caridad Fernández, guionista y profesora de guion y escritura creativa.
«La madurez significa haber recuperado aquella seriedad que de niños teníamos al jugar»
Friedrich Nietzsche
En uno de los primeros libros que leí sobre escritura creativa, “La práctica del relato. Manual de estilo literario para narradores”. Ángel Zapata, su autor, encabezaba con esta cita de Nietzsche un capítulo sobre la personalidad en la escritura. La cita evocó mis juegos infantiles y la pérdida de la seriedad y la concentración de aquellos juegos. Ser adulta significaba abandonar tareas como la elaboración de platos de pámpanos con pimentón hecho de ladrillos machacados, recorrer el túnel que llevaba de mi casa a la estación de tren por el subsuelo de Zamora o modelar casas para caracoles con barro. Estudié Ciencias Políticas para hacer algo de provecho porque ser trapecista y montar en bicis de tres ruedas, que es lo que yo de verdad quería hacer, no se consideraban actividades provechosas.
A pesar de (o debido a) mis cinco provechosos años de universidad, acabé dando clases de guion. Es muy frecuente que durante los cursos nos enfrentemos a momentos en que alguien dice “no se me ocurre nada”, ”no tengo imaginación” ,“no tengo facilidad para esto de las ideas”. Por eso empezamos a incluir en las clases ejercicios creativos como constelaciones de palabras o escritura automática. Eran unos minutos de relax antes de comenzar con cosas “serias”, y entonces la sala se convierte en un universo lúdico donde todo está permitido. En pocos minutos, el bloqueo mental se convierte en un montón de imágenes fascinantes: un anciano comiendo un helado gigantesco de tutti frutti, un dragón saliendo de la alcantarilla de la Puerta del Sol, o una conversación por SMS con un habitante del planeta Sedna. Después de la avalancha de imágenes sugerentes volvíamos a la trama de 15 escenas en cuatro actos, y los dragones, los helados de tutti frutti y el planeta Sedna se quedaban en el limbo. En el mismo limbo que las casas de barro para caracoles o mis aspiraciones de trapecista.

Practicar la meditación puede multiplicar tu creatividad. (Foto: Gurumustuk Singh, de Flickr)
Para estos ejercicios inicié la búsqueda de referentes sobre escritura creativa y me encontré con joyas como “El Gozo De Escribir” de Natalie Goldberg o “Zen en el arte de escribir
” de Ray Bradbury. Con estas lecturas me di cuenta de que tomamos sin parar cursos para abordar innumerables cuestiones teóricas y técnicas pero nos olvidamos del material esencial en el proceso creativo. Amontonamos conocimientos y damos la espalda a las ideas que palpitan en nuestro interior. Es como enseñar a un niño a hablar con clases de gramática.
Un ejercicio de clase o la práctica de la escritura son espacios propicios para la creatividad. También lo es—menos de lo que debería— la sala de trabajo de un equipo de guion. Las artes plásticas tienen la ventaja de sumergirnos en la materia que estamos manipulando, buen compost, que diría Natalie Goldberg. Y a todos se nos ha lanzado al cuello alguna vez el dragón de la puerta del sol mientras hacíamos el transbordo a la línea 3.
Sin embargo nos sentimos con frecuencia a merced de la llegada de la milagrosa inspiración, envueltos, normalmente en medio de anuncios, facturas, hipotecas, campañas electorales y reuniones de comunidad de propietarios. No vamos a controlar la inspiración—mejor admitirlo desde el principio— pero ¿y si tuviéramos a nuestro alcance una herramienta cuya práctica nos aporta claridad mental y concentración?
David Lynch participó con una conferencia en el Reina Sofía en octubre de 2013 en el marco del Festival Rizoma. En ella habló y respondió a las preguntas sobre la práctica de la meditación como herramienta en el proceso creativo, tema que aborda en su libro “Atrapa el pez dorado” . Esa conferencia sirvió para derribar algún que otro prejuicio: asociamos con más frecuencia ser budista y meditar que ser, por ejemplo, portero de discoteca y meditar; pero los beneficios de la meditación van más allá de creencias y estilos de vida.
Manuel de Mena nos resume los beneficios de la meditación enfocada a descubrir y desarrollar la creatividad:
– El proceso creativo es un proceso puramente mental-emocional. No existe nada que amplíe y potencie más la mente y las emociones que la meditación en la creatividad.
– Aumenta la Consciencia y la Autoconsciencia. Genera claridad mental y emocional, despeja la mente y amplifica la concentración. Cualquier tipo de proceso creativo mejora considerablemente después de una meditación.
– Durante la meditación debido a la potenciación de la mente suelen ocurrir auténticas revelaciones e inspiraciones.
– Dispara la imaginación, eliminando las barreras de la mente limitada por un exceso de lógica y razonamiento.
– Nos conecta y nos desvela el mundo mental y emocional. Entramos en contacto con las emociones tomando consciencia de ellas. Toda creación tiene como origen y como finalidad la emoción. Nace de las emociones y toda creación siempre busca emocionar al espectador, lector, oyente, etc. Debido al desconocimiento y represión emocional que la gran mayoría de las personas tienen, esta vía de conocimiento se hace valiosísima para todo tipo de creadores y artistas.
Manuel de Mena es monitor de relajación, meditación y crecimiento personal
Caridad Fernández es profesora de guion y escritura creativa.
Ambos imparten el taller de meditación y proceso creativo.
Taller de meditación y proceso creativo
Junio de 2014. Todos los lunes de 20,00 a 22,00 5 sesiones
Centro Mandala c/ Cabeza nº 15, 2º dcha. Madrid. Metro Tirso de Molina www.centromandala.es
Contacto: cadelcobre@gmail.com //Tf 615 95 00 94 www.caridelcobre.com
Precio del taller: 40 €
Más información en su página de Facebook.