Cinco cosas que un guionista novel debe hacer además de escribir

Ni Messi, ni Cristiano Ronaldo, ni Griezzman se despertaron un día y se convirtieron en los tres mejores futbolistas del mundo. Tuvieron que entrenar, practicar, ver vídeos y estudiar a otros futbolistas, aprender la técnica, la táctica, la estrategia, trabajar con sus entrenadores y trabajar con sus compañeros de equipo. Además, no solo se tuvieron que dedicar a jugar al fútbol, sino a pensar en ellos como un producto, a ver cómo venderse mejor en muchas situaciones, a hacer marketing de sí mismos, por muchos asesores que tengan. Y para el guionista, no es diferente. ¡Te voy a contar cinco cosas que un aspirante a guionista puede hacer, además de escribir, que harán que su proceso sea tan complejo y completo como el llevado a cabo por los futbolistas antes mencionados.

Estate al día de la industria

Comprender el aspecto comercial de la industria del audiovisual es tan importante como comprender el proceso creativo. Por un lado, si está escribiendo una película que nadie quiere comprar, es más probable que recibas una recepción de posibles directores, productores o cadenas. Sin embargo, si puedes leer las hojas de té, quizás puedas aprovechar un tema que encenderá la ciudad en llamas. Aquí te recomiendo algunas páginas que debes leer para estar al día de lo que pasa en el mundo de la televisión y el cine en tu país o a nivel mundial.

Hay muchísimas medios de comunicación especializados en televisión y cine. Éstos son solo unos ejemplos. Solo debes estar al día de todos los proyectos que hay, de ver qué se está haciendo, tanto en cine como en televisión, para ver cuáles son las tendencias, para seguir el camino o, por el contrario, para innovar, para hacer algo totalmente diferente.

Lee otros guiones

Cuando Quentin Tarantino explotó con Pulp Fiction, inspiró a varios guionistras a que volvieran a imaginar la forma en que contaban sus historias, utilizando nuevas estructuras. Cuando M. Night Shyamalan apareció en escena, inspiró a los guionistas a centrarse en los finales sorpresa. Cuando surgió Christopher Nolan, los guionistas se animaron a contar historias con realidades más grandes que la vida. Corto y dulce, los mejores guionistas son los que están bien leídos. Debe leer los guiones que se han hecho, de modo que tenga un barómetro realista sobre cómo se presentan sus historias. Cuando entiendes la jerga específica del guion, encontrarás más personas que pueden leer tu guion.

Ve series y películas

Sin embargo, leer los guiones solo no es suficiente. Necesitas ver el producto final. Ir al cine es tan importante para un guionista como ir a un gimnasio para un atleta. Pero en lugar de manejar bolas de agua y hacer flexiones, estás acumulando una gran cantidad de palomitas de maíz y refrescos. Suena mejor, ¿verdad? Con toda seriedad, ver películas es pan y mantequilla de un guionista. Lo mismo que ver series. Y si no tienes dinero para ir todas las semanas al cine, dos veces, para eso estamos en el siglo XXI, con un montón de plataformas a tu alcance. Necesitas alimentarte a ti mismo, no solo con buenas películas y serie, sino también ver aquellas que no funcionaron. Analiza por qué. Necesitas entender cómo es una mala película o serie tanto como las buenas. Para no hacerlo. Nadie se propone hacer una mala película, pero ¿el problema fue el guion? ¿O fue el problema algo más? ¡Es importante saber estas cosas!

Habla con tus iguales

Cuando se te ocurre una idea, una de las mejores cosas que puedes hacer es hablar sobre ella. Del mismo modos que acudir a un terapeuta para ayudarte con tu matrimonio o tu relación con tu madre, hablar sobre sus ideas lo ayudará a evitar errores tempranos. No hay nada mejor que iluminar la cara de tu amigo con una gran idea. Sin embargo, también puedes ver sus reacciones cuando una idea simplemente no funciona. Escuchar los comentarios es uno de los procesos más importantes para un escritor.

Enseña tu material

Por último, pero no menos importante, una vez que tengas un primer borrador, debes mostrar tu material. Tener amigos que lean el guion es un gran primer paso. Puedes seguir con que los actores se reúnan para hacer una mesa italiana. Escuchar cómo se lee en voz alta el guion puede ser un ejercicio revelador. Además, tener dos actores que se reúnan contigo para representar escenas es una excelente manera de afinar la emoción en ese momento. Esto también es beneficioso para los actores que practican su oficio y ayudan a agregar un toque a la escena. En conclusión… Además de sentarse y escribir, hay formas de elaborar tus historias y encontrar la mejor manera de poner en forma su guion. ¡Así que recuerda entrenar duro para que cuando te toque saltar al campo y marcar el gol decisivo!